viernes, 31 de octubre de 2014

Imputado por maltrato animal por tirar a una oveja por el acantilado de Punta Carnero

La Guardia Civil ha imputado por maltrato animal a una persona que supuestamente arrojó a una oveja viva por uno de los acantilados del faro de Punta Carnero, en Algeciras (Cádiz).
El animal estaba enfermo y el dueño no podía asumir los costes de la asistencia veterinaria.


Según explica la Benemérita en una nota, los hechos tuvieron lugar cuando los agentes tenían establecido un operativo en prevención de la pesca ilegal en la carretera CA-223, término municipal de Algeciras, y fueron alertados por un usuario de la misma que había observado a una persona arrojando a una oveja viva por uno de los acantilados antes mencionados.
Los agentes se trasladaron al lugar con el denunciante, identificando al autor del ilícito que se encontraba en el lugar y localizando al animal que se encontraba aún con vida, atrapado en la maleza, rescatándolo.
El animal fue trasladado por los agentes a un centro veterinario, donde fue sacrificado debido a las heridas que presentaba. El imputado arrojó al animal por el acantilado ya que, según aseguró, estaba enfermo y no podía costear la asistencia veterinaria.
Una vez instruidas las diligencias correspondientes, han sido puestas a disposición de la autoridad judicial.

jueves, 30 de octubre de 2014

Facebook: sangre sí, tetas no

Facebook no permite desnudos, penes ni pezones femeninos, pero sí imágenes de animales maltratados, peleas de perros, ensañamiento con gatos.
En demasiadas ocasiones la red social es una bomba de relojería, un caldo de cultivo para los maltratadores de animales.
El exhibicionismo es un pésimo aliado para los miles de animales que son torturados por desaprensivos que, además, son usuarios de redes sociales.

Imagen de The Maizo que ilustra la petición en Change.org "Facebook: no permitas promocionar el maltrato animal"
Imagen de The Maizo que ilustra la petición en Change.org "Facebook: no permitas promocionar el maltrato animal"
Hace un par de años subí a Facebook una fotografía del gran bailarín ruso Rudolf Nureyev realizada por Avedon, referencia para una generación de artistas y fotógrafos. Se trataba de un desnudo frontal, donde el genio de la danza mostraba su enigmático rostro; una piel vainilla sobre un cuerpo perfecto de donde surgía un pene palmario enmarcado en unas caderas aladas. Desafiantemente bello. Todo iba bien, muchos megustas y comentarios favorables, hasta que empecé a recibir mensajes de Facebook en los que me acusaban de haber infringido las normas de la red social y, debido a las denuncias por la imagen, anunciaban el cierre de mi página. Dicho y hecho. Nureyev, su generoso pene y yo desaparecimos de la red en cosa de segundos.
Gracias a una cuenta habilitada por una buena amiga pude seguir conectada durante algunas semanas. Entonces comprobé la cantidad de denuncias que reclamaban el cierre de varias páginas de Facebook en las que se fomentaba la violencia contra los animales. Desde México exigían a los administradores de Facebook que considerasen el maltrato animal como delito, denunciando una página donde se incitaba a matar perros y donde había comentarios como el siguiente: «Matar animales es divertido». También se solicitaba la retirada de la página “ Peleas de perros”, donde los administradores subían todos los días imágenes de animales reventados a palos, desangrados, moribundos, con los ojos fuera de las cuencas, acompañadas de frases como «este perro se creía él muy gallito, pero así terminó». “ Alza la Pata” también denunciaba varias páginas donde la violencia brutal era el reclamo de psicópatas que veían realizados sus sueños de matar animales para después mostrarlos a sus amigos.
El exhibicionismo es un mal aliado para los miles de animales que son torturados por desaprensivos que, además, son usuarios de redes sociales. En la mayoría de los casos denunciados la respuesta de Facebook fue siempre la misma: «Hemos revisado la página que has denunciado por contener violencia gráfica, pero no infringe nuestras normas comunitarias». Es decir, que, a pesar de que la red social cuenta con un apartado concreto en el que se trata el tema de la violencia, los administradores no consideran que maltratar, mutilar, acuchillar y destripar a un animal sea apología del maltrato animal y por tanto «no infringe» sus normas.
Esto se ha repetido hasta la saciedad. Miles de peticiones para cerrar cuentas, que, cuando en algunos casos consiguen su objetivo, observan cómo no tardan en volver a abrirse con el mismo contenido delictivo pero bajo otro nombre. Y otra vez a localizarlo y a pedir que lo cierren, entrando en un círculo perverso que acaba dejándonos un sabor amargo a quienes sentimos que cada imagen de maltrato animal en Facebook es un reclamo para miles de personas violentas que pueblan la red. Una red que les da cobijo y que les protege, mientras censura otros contenidos nada cruentos. Por ejemplo, se permiten las fotos de fluidos corporales, salvo el semen; o los besos entre hombres y mujeres, pero no entre personas del mismo sexo; también es difícil ver pezones de mujeres. Hace unos meses Facebook le declaró la guerra a la lactancia, mejor dicho, a la lactancia siempre que se vean pezones.
De hecho, esta doble moral de Facebook fue puesta de manifiesto por Rafa Gil, creativo de la agencia de publicidad Kitchen. Después de que la plataforma se negara a cerrar una página denunciada por miles de usuarios, en la que se promocionaban peleas de perros, Gil creó " Peleas de tetas" para que los usuarios votaran sus senos preferidos y lanzó abiertamente el reto: " ¿Qué cerrará antes Facebook, Peleas de perros o Peleas de Tetas? Denunciemos la hipocresía. Ni una página más de violencia animal en Facebook". Decenas de miles de adhesiones en pocas horas provocaron el cierre fulminante de las dos. Pero la pelea continúa.
Los administradores de la red social con más de 1.230 millones de usuarios deberían escuchar a  Núria Querol, doctora y presidenta de la GEVHA (grupo para el estudio sobre la violencia hacia humanos y animales), cuando afirma: «Aunque no hay reglas al cien por cien, en la mayor parte de los casos quien abusa de los animales en forma de violencia, ensañamiento y sadismo tiene tendencia a hacer lo mismo con las personas. (…) Existe un vínculo claro entre ambos tipos de violencia aproximadamente en nueve de cada diez casos».
¿Pero de dónde viene esa permisividad con la violencia?, ¿por qué esa aparente complicidad de Facebook con las cuentas de maltratadores de animales?, ¿cuál es el motivo de tanta sinrazón, de tanta anestesia emocional hacia ellos? Un repaso rápido por la vida de Mark Zuckerberg, creador de Facebook, puede ayudarnos a aclarar algunas cosas.
Zuckerberg tiene la costumbre de fijarse retos personales en la vida. Hace unos años el reto fue «ponerse corbata todos los días», luego llegó el reto de «aprender chino mandarín» y después, y aquí empieza la historia, el creador de Facebook, decidió que quería alimentarse sólo de animales que pudiera matar con sus manos. Empezó con animales pequeños. Una langosta a la que hirvió en agua caliente y que, por lo visto, tardó mucho en morir, proceso que Zuckerberg describió como «una muerte complicada, pero con buen sabor y excitante». Después empezó a matar conejos, cerdos y ovejas. Y a partir de entonces Zuckerberg ha seguido imparable en su nuevo reto, que incluye la muerte de un caballo, un oso y un bisonte al que convirtió en hamburguesas. Parece que matar animales se ha convertido en una pasión para Zuckerberg, al que le gusta informar de sus logros a sus más íntimos. Por ejemplo, publicó una nota a los 847 amigos de su cuenta privada donde anunciaba: «Acabo de matar a un cerdo y a una cabra, las he degollado porque esta es la forma más dulce de matar». Durante un tiempo estuvieron publicadas imágenes de ovejas acuchilladas por el propio Zuckerberg. Al parecer, destripar, arrancar el corazón y las vísceras con sus propias manos y preparar con ellas caldos y guisos le hace sentir vivo y cercano a la naturaleza.
En esa espiral,  Zuckerberg llegó a obtener una licencia de caza para seguir matando. Sin embargo, la muerte del oso citada anteriormente se presenta llena de dudas. Él mismo lo anunció, pero más tarde lo desmintió, probablemente al recibir quejas y comentarios de sus amigos desaprobando su actuación.
Y ahora la pregunta razonable es cómo es posible que Zuckerberg mate tal cantidad de animales, a los que por cierto no le da tiempo a descuartizar, guisar y comer, sin salir del lugar donde vive. Porque, evidentemente, Zuckerberg ya no mata sólo para comer, lo hace por placer, el placer de matar y contárselo a sus amigos. La posibilidad de seguir degollando ovejas siempre que quiera se la brindó la chef de Silicon Valley, Jesse Cool, que vive en Palo Alto, donde reside el creador de Facebook. Cool además tiene un restaurante y muchos contactos con los granjeros de la zona, a los que habría presentado a su amigo para que éste pudiera seguir destripando ovejas, cerdos, etc. Después de conocer “el reto” de Zuckerberg y de comprobar lo bien que lo ha llevado a cabo y lo que disfruta descuartizando animales, es más fácil entender de dónde viene la deriva ética en la administración de los contenidos de Facebook relacionados con la violencia hacia los animales.
Pero ahora no sólo somos los grupos animalistas –o cualquier persona con un mínimo de sensibilidad y empatía– los que piden que se ponga fin a esta locura de ceder espacio a los maltratadores. Recientemente el  FBI declaró que «los jóvenes que torturan y matan animales tienden a ejercer violencia contra las personas cuando son mayores si no se los controla». Una nueva clasificación estadounidense de los delitos de crueldad animal ayudará a descubrir a los abusadores antes de que se agrave su conducta y poder juzgarlos.
Durante años, el FBI archivó el abuso a los animales bajo la etiqueta de "otros" junto con infracciones menores, con lo cual resultaba algo difícil de rastrear y combatir. Sin embargo, recientemente, la policía federal declaró que incluirá la crueldad hacia los animales en el Grupo A de delitos graves, como lo son el homicidio, el incendio intencional y el asalto. Las preguntas son: ¿Empezará el FBI a investigar y rastrear las páginas de Facebook donde se mata animales? ¿Considerará peligrosa la política de contenidos de la red social al dar espacio a los violentos? ¿Cuánto tiempo tardarán en ejercer la presión contra las páginas que muestran “peleas de perros”, crucifixión de perros y gatos, aplastamiento de pájaros y así hasta la infinita lista de brutalidades que ampara la red de Zuckerberg? No es difícil llegar a la conclusión de que en demasiadas ocasiones la red social es una bomba de relojería, un caldo de cultivo para los violentos.
Sí, yo uso las redes sociales y las defiendo como una herramienta de trabajo, de difusión, de comunicación, pero tengo claro que jamás pueden servir de altavoz para personas que potencian la crueldad. Es imposible avanzar hacia una cultura de la paz, hacia una educación que erradique la violencia y fomente el respeto hacia los animales y hacia las personas, si en la red se sigue dando cobijo a desaprensivos.
Ojalá la próxima notificación que recibamos de Facebook sea un aviso en el que nos informe de que han sido cerradas todas las páginas que hacen apología del maltrato animal. Pero, mientras llega ese momento, debemos seguir denunciando y exigiendo su cierre, y un cambio profundo en las normas comunitarias de esa red social, tan poco éticas en la actualidad. Porque somos muchos más quienes defendemos los derechos de los animales. Somos la mayoría social. No dejemos nunca de hacerlo. Nunca.

miércoles, 29 de octubre de 2014

Votos y toros: PP y PSOE, a favor de la subvención anual de 130 millones

Todos los eurodiputados de PP y PSOE, excepto dos abstenciones, votan a favor de que continúen las subvenciones europeas a la tauromaquia: 130 millones de euros anuales.
El avance de las posiciones de defensa de los derechos de los animales en la sociedad debe dar el paso de reflejarse también en las organizaciones políticas que nos representan en las instituciones.


Imagen de la serie "Sanfermines: tortura y muerte en el ruedo. Julio, 2014. Foto: Tras los Muros
Foto de la serie "Sanfermines: tortura y muerte en el ruedo", realizada en Pamplona en julio de 2014 dentro del proyecto de fotoactivismo traslosmuros.com
En el marco de la elaboración de los presupuestos anuales de la Unión Europea, la pasada semana se vivió en el Parlamento Europeo una nueva votación, a través de la que se intentaba eliminar uno de los cordones umbilicales que mantienen vivo al sector taurino: las subvenciones directas a la ganadería de reses destinadas a la lidia, que ascienden a 130 millones de euros anuales.
Como todos y todas sabemos, este sector -además de lo que supone desde un punto de vista ético- es deficitario y depende casi en exclusiva de la financiación pública. Ya sean las administraciones locales, las autonómicas, las estatales o, como es este caso, las europeas, son las inyecciones de dinero público las que mantienen vivo el negocio taurino, abandonado por la inmensa mayoría de la ciudadanía, que sí ha avanzado en posicionamientos éticos de respeto a los animales.
El pasado 22 de octubre se votó la enmienda del Grupo Verde Europeo que pedía la supresión de estas ayudas a la cría de ganado destinado a lidia. Ganamos la votación de la enmienda pero no fue admitida, al necesitar mayoría absoluta del pleno del europarlamento. Esto se traduce en que este año, nuevamente desde Europa, se financiará la tauromaquia.
Vistos los datos, y superada la frustración de habernos quedado tan cerca, debemos pasar al análisis y a poner caras y nombres a los que han consentido que un año más se maltrate y asesine toros con el dinero de todos y todas las contribuyentes.
La enmienda que solicitaba la supresión de las ayudas la presentó el Grupo Verde Europeo, donde se incluye EQUO-Compromís, y fue apoyada por diputados y diputadas en Europa de Unió Democràtica de Catalunya, Ciudadanos, UPyD, Convergència Democràtica de Catalunya, Nova Esquerra Catalana, Esquerra Republicana de Catalunya, Iniciativa per Catalunya Verds, Izquierda Unida, Podemos, Bildu y Alternativa Galega de Esquerda.
Se abstuvieron un diputado de Ciudadanos, otro de PNV y la cabeza de lista del PSOE, Elena Valenciano.
Y, por supuesto, no dejaremos de recordar que todos los diputados y diputadas del PP y PSOE, exceptuando la abstención de los socialistas Valenciano y Javi López, votaron para que estas subvenciones continuaran, siendo responsables con sus votos del sostenimiento de esta cruel y deficitaria actividad.
¿Qué podemos hacer ahora para que el año que viene no se repita esta votación?
Sin duda, debemos mantener la presión social que hace que cada día seamos más los que rechazamos este tipo de espectáculos. Pero, ¿qué más se puede hacer? Influir en los procesos internos de las organizaciones políticas con representación; siempre que nos den la oportunidad de hacerlo, claro. Por ejemplo, hace pocos días se celebró el congreso constituyente de Podemos, partido en claro ascenso y donde los círculos relacionados con la protección animal han realizado un trabajo de influencia interna muy positivo, de cara a futuros procesos electorales, respecto a las posiciones de la organización en derechos animales. En la clausura de dicho congreso, Juan Carlos Monedero expresó estas posiciones de manera explícita: " Quien maltrata a los animales, maltrata a los humanos".
Otro ejemplo es la elección de candidaturas en procesos de primarias abiertas en los partidos. En las pasadas elecciones internas para secretario general del PSOE, el tema taurino se convirtió, como muchos y muchas recordaréis, en uno de los ejes de debate entre candidatos, dejando muy clara la posición del que finalmente fue elegido máximo responsable del PSOE, Pedro Sánchez: una absoluta ambigüedad, dependiendo del momento y el lugar en los que el Secretario General se encuentre.
Actualmente está en marcha el proceso de elección de candidaturas en Izquierda Unida de la Comunidad de Madrid. En este caso, se enfrentan la diputada Tania Sánchez, que suprimió los espectáculos taurinos en su etapa como concejala de Cultura y Espectáculos en el municipio de Rivas-Vaciamadrid, y el asesor de CCOO José Antonio Moreno Díaz, asiduo espectador en la plaza de toros de Las Ventas. Ante esta disyuntiva (entiendan la ironía los defensores de los animales), la posibilidad ciudadana de participar en estos procesos de elección (sin que nuestro voto en las próximas elecciones autonómicas esté vinculado a esta u otra formación) ayudaría a que se posicionen candidatos y candidatas receptivas y sensibles con las posiciones que nuestro colectivo viene defendiendo históricamente, y que las organizaciones políticas, a excepción de Pacma, nunca han situado en el eje central del debate político.
El avance de las posiciones de defensa de los derechos de los animales en la sociedad debe dar el paso de reflejarse también en las organizaciones políticas que nos representan en las instituciones y, para ello, debemos contribuir a situar en el debate político, tanto interno como externo, nuestras justas reivindicaciones, por lo que entiendo importante participar de todos los procesos políticos que nos den la palabra y, sobre todo, la opción de voto.

martes, 28 de octubre de 2014

El PP pide vía libre a la caza en los parques nacionales

Una enmienda popular a la ley de estos espacios protegidos solicita eliminar los plazos para suprimir los cotos
El texto deja prorrogadas las actividades cinegéticas hasta que los dueños de los cazaderos firmen "acuerdos voluntarios" para cerrarlos o reciban una indemnización.

La berrea, una aventura que descubre la riqueza natural de Castilla-La Mancha
La caza es una actividad aún permitida en Cabañeros.

Prórroga sin límite para los cotos de caza en parques nacionales. El Partido Popular ha dado una vuelta de tuerca a su visión sobre los espacios protegidos en una enmienda al proyecto de ley presentado por el Gobierno. Quiere que no haya obligación para que las cacerías en estas áreas terminen.
El texto del Grupo Parlamentario Popular en el Senado solicita que "los plazos anteriores se entenderán prorrogados hasta la celebración de dichos acuerdos o la aplicación de cualquier otro procedimiento para el rescate de los correspondientes derechos". Esto viene a decir que los cotos que están ahora mismo ya en funcionamiento, como los del Parque Nacional de Cabañeros, cuyo territorio está compuesto básicamente por zonas de caza, puedan seguir organizando monterías hasta que los dueños quieran (mediante un acuerdo) o las propias administraciones les indemnicen por dejar de hacer cacerías. El proyecto de ley gubernamental daba un plazo máximo de cuatro años. La declaración de Cabañeros como parque nacional establecía el año 2017 como límite para la actividad cinegética.

Cartel Ecologistas en Acción contra la caza en Cabañeros / Imagen: Ecologistas en Acción
Cartel Ecologistas en Acción contra la caza en Cabañeros. / Imagen: Ecologistas en Acción

Pero además, Ecologistas en Acción interpreta que esta enmienda, que se refiere a los "derechos de terceros" en cuanto a las actividades que se permiten en los terrenos de máxima protección medioambiental, también es una puerta abierta para prácticas como "la pesca recreativa, la actividad forestal (tala de madera), la minería....". Los parques nacionales representan el 0,7% del territorio español. "Una pequeña joya natural", dicen, que "el PP se carga" con esta propuesta, sentencian.

lunes, 27 de octubre de 2014

Réquiem por la fauna marina canaria

Cetáceos, tortugas y aves se encuentran en grave peligro a causa de las prospecciones petrolíferas autorizadas por el Ministerio de Industria a Repsol cerca de las costas de Lanzarote y Fuerteventura, dos islas declaradas "Reserva Mundial de la Biosfera" por la UNESCO.

La ballena calderón es una de las especies de cetáceos en peligro por las prospecciones petrolíferas. Foto: Sociedad para el Estudio de los Cetáceos en el Archipiélago Canario (CECAC)
La ballena calderón es una de las especies de cetáceos en peligro por las prospecciones petrolíferas. Foto: ©SECAC (Sociedad para el Estudio de los Cetáceos en el Archipiélago Canario)
El mar que baña las costas de Lanzarote y Fuerteventura se enfrenta a uno de sus peores enemigos: las prospecciones petrolíferas autorizadas por el Ministerio de Industria a Repsol. Ni las manifestaciones más multitudinarias de la historia celebradas en ambas islas, ni el clamor de la comunidad científica, ni la férrea oposición de los colectivos sociales, ni la firmeza de las fuerzas políticas canarias (a excepción del PP y UPyD) han sido suficientes para que el Gobierno del Estado desista de un proyecto que se ha tramitado de manera opaca en los despachos ministeriales de Medio Ambiente e Industria, y de la multinacional petrolera.
Muchos se preguntan qué sucedería en el caso de que en Canarias se produjera una catástrofe similar a la ocurrida en el Golfo de México, pero pocos opinan sobre una de las consecuencias que se desencadenará desde el mismo momento en que se inicien los sondeos: sus efectos perjudiciales sobre la fauna marina.
Veintiocho de las 87 tipos de cetáceos que existen en el mundo se encuentran en uno de los espacios más ricos para esta especie del planeta: el estrecho que separa las islas de Lanzarote y Fuerteventura del continente africano. Se trata, según la Sociedad para el Estudio de los Cetáceos en el Archipiélago Canario (SECAC), de “un hábitat singular por la profundidad de sus aguas y las especiales condiciones oceanográficas”.
Un hábitat de extrema sensibilidad en el que se colará uno de los intrusos más letales para las especies marinas. Junto a las maniobras militares, que también se desarrollan con frecuencia en Fuerteventura, donde el Ministerio de Defensa ha creado una unidad especial para intervenciones rápidas en el desierto, las prospecciones petrolíferas constituyen una de las acciones guiadas por la mano del hombre más peligrosas para la fauna.
Michel André, ingeniero y biólogo experto en contaminación acústica, señala que “el medio marino, como todo medio natural, se rige en base al equilibrio de los organismos que lo habitan, por lo que cualquier desajuste desequilibra la cadena”. En el caso de los cetáceos, señala que “la contaminación acústica puede enmascarar los sonidos que emplean para comunicarse, alimentarse u orientarse. Una ballena puede intercambiar información acústica hasta miles de kilómetros de distancia pero, si no se oyen, tendrán que acercarse más, hasta acabar por competir por comida en áreas de alimentación cada vez más reducidas”.
Su análisis coincide con las advertencias realizadas por la SECAC sobre los efectos que tendrían las prospecciones sobre la comunidad de cetáceos: “La exposición a sonidos de suficiente intensidad provoca la reducción de la sensibilidad acústica temporal o permanente, el desgaste de las células auditivas y afecciones anatómicas; genera estrés y altera sus canales de comunicación”.
Los perversos efectos de las prospecciones sobre la fauna marina son objeto de preocupación y debate en la comunidad científica, principalmente en lo que concierne a los cetáceos, pero también en lo que respecta a otras especies que habitan en dos islas declaradas en su totalidad territorial como “Reserva Mundial de la Biosfera” por la UNESCO, y que contienen numerosos espacios protegidos tanto en su interior como en su línea de costa y en el mar que las circunda.
Universidades, organizaciones de conservación e investigación internacionales como OCEANA, WWF, GREENPEACE, SECAC, COUSTEAU DIVERS, SEO/BirdLife, Ecologistas en Acción, los gabinetes científicos de las Reservas de la Biosfera de Lanzarote y de Fuerteventura, entre otras entidades, han puesto sobre la mesa del Ministerio de Medio Ambiente distintos informes en los que advierten de las consecuencias que las prospecciones podrían provocar sobre la naturaleza marina.
Informes que fueron desestimados durante el proceso abierto en la etapa en la que Miguel Arias Cañete ejerció como ministro de Medio Ambiente. Un ministro cuyas  vinculaciones con las empresas petroleras afloraron durante el examen que tuvo que superar en el Parlamento Europeo antes de ser elegido como comisario de Energía y Cambio Climático. La pregunta que hoy muchos se planean es por qué es incompatible tener acciones en empresas petroleras con el cargo de comisario europeo pero, sin embargo, no lo es con el puesto de mayor responsabilidad en materia medioambiental de España.
Otra, son las especies amenazadas que figuran en la lista elaborada por las organizaciones de conservación. En el caso de las tortugas, según la SECAC, “estarán expuestas a los efectos dañinos de la contaminación por petróleo por diferentes vías, entre ellas la ingesta (no discriminan entre lo que puede ser un alimento y lo que no, de manera que ingieren lo que consideran que tiene un tamaño apropiado, incluyendo todo tipo de basura y bolas de petróleo), la inhalación (inhalan un gran volumen de aire antes de iniciar el buceo y continuamente salen a la superficie a respirar) y otras indirectas, como la degradación del hábitat y la afección de las especies que forman parte de su dieta”.
La pardela cenicienta fue elegida ave del año en 2013 por SEO/BirdLife. Foto: ©SEO/BirdLife - ©Juan Bécares
La pardela cenicienta fue elegida ave del año en 2013 por SEO/BirdLife. Foto: © SEO/BirdLife - Juan Bécares
 
Hasta 25 áreas marinas protegidas podrían verse afectadas por las actividades petrolíferas SEO/BirdLife detalla en otro informe el impacto que tendría sobre las aves. Concretamente, apunta a dos  Áreas Importantes para la Conservación de Aves (IBA) que podrían verse seriamente afectadas: “Los islotes de Lanzarote”, que albergan la mayor población reproductora del territorio nacional de pardela cenicienta, así como las únicas colonias de paíño pechialbo; y, por otro lado, el “Estrecho de la Bocaina”, por donde pasan varias veces al año los ejemplares reproductores de pardela cenicienta de las  Islas Salvajes -la mayor colonia del Atlántico- durante sus viajes de alimentación hacia la plataforma costera del noroeste de África”.

domingo, 26 de octubre de 2014

Las investigaciones por malos tratos a animales se triplican en solo tres años.

Más de sesenta procesos han sido incoados por el Ministerio Fiscal entre 2011 y 2013, pero las condenas todavía siguen siendo algo excepcional.


Caballos desnutridos con las costillas marcadas bajo la piel, perros envenenados con cebos malintencionados o aves de corral a las que apenas les quedan una pluma. En los últimos años, la Región se ha visto salpicada por algunos crueles casos de malos tratos a animales que han conmocionado a la sociedad. Una realidad a la que la Fiscalía de Medio Ambiente ya trata de plantar cara. El Ministerio Público ha triplicado la incoación de procedimientos judiciales por delitos de esta naturaleza. Si entre 2008 y 2010 se incoaron en la comunidad 18 procesos por malos tratos a animales, entre 2011 y 2013 la cifra se triplicó hasta los 64 casos.
Según explica la Fiscalía en su memoria anual, el pasado año se incoaron en la Región 13 procedimientos judiciales por presuntos maltratos a mascotas. La cifra es algo inferior a los 28 casos registrados en 2012. A nivel nacional, según explica la memoria del Ministerio Público, se dieron 515 procesos por delitos de esta naturaleza, frente a los 504 que se investigaron en 2012.
El aumento de diligencias ha crecido en paralelo a la propia actividad de este área del Ministerio Público. La Fiscalía de Medio Ambiente triplicó los asuntos tramitados desde 2006, año de su creación, hasta 2013, según destaca el citado balance del organismo. El documento precisa que, en total, se han formulado 1.061 escritos de acusación, la mayoría de los cuales tienen su origen en denuncias directamente presentadas en la Fiscalía. En Murcia, el fiscal especialista tramitó 335 diligencias y sacó adelante 41 escritos de acusación.
Respecto a las diligencias de investigación realizadas por el Ministerio Público en materia de malos tratos a animales, las cifras son bastante inferiores. El pasado año, la Fiscalía solo llegó a incoar diligencias por un caso, y éste fue archivado. En los años anteriores las cifras no fueron mucho mayores. Tampoco a nivel nacional éste es un tema que requiera de muchas diligencias. En 2013 se incoaron 38 en toda España, seis menos que el año anterior.
El Código Penal define este delito como el hecho de maltratar injustificadamente a los animales domésticos o amansados, mediante cualquier medio o procedimiento, causándoles la muerte o provocándoles lesiones que menoscaben gravemente su salud. Es castigado con penas que van desde los tres meses a un año de prisión o bien con la inhabilitación especial de uno a tres años para el ejercicio de oficio o comercio que tenga relación con los animales.
Aunque cada vez son más las investigaciones que se inician en la Región por casos de presunto maltrato animal, lo cierto es que las condenas por estos delitos siguen siendo aún algo residual. Según la estadística del Instituto Nacional de Estadística (INE), en 2012 -último dato del que se dispone- solo hubo una condena en Murcia por este motivo. En 2011 hubo dos condenas, en 2010, ninguna y en 2009, cuatro sentencias condenatorias.


sábado, 25 de octubre de 2014

PACMA muestra las lamentables condiciones de los perros de la Policía en Sevilla

Sabemos que el Jefe de la Unidad Canina ha dirigido en varias ocasiones reclamaciones para que se solventen estos graves problemas, y que han sido ignoradas por sus superiores.
PACMA muestra las lamentables condiciones de los perros de la Policía en Sevilla
En este informe se puede observar las condiciones lamentables en las que viven los perros de la Unidad Canina de la Policía Nacional en Sevilla, cuyas instalaciones llevan construidas más de 20 años sin acometer ningún tipo de reforma.
En las imágenes se pueden observar las condiciones insalubres de los cheniles donde habitan los perros, con zonas que suponen peligro para la integridad de los animales, unas pistas de entrenamiento en completo abandono, la clínica veterinaria tercermundista y falta de las condiciones higiénico-sanitarias debidas, e incluso el total abandono de los medios anti-incendio, algo que vulnera la legislación de prevención de riesgos laborales.
Alguna de la situaciones que viven estos perros, podría incluso considerarse como un caso de maltrato animal, siendo esto un delito contemplado en el Código Penal.   
Se puede observar como hay estructuras metálicas totalmente desgastadas y oxidadas y con aristas cortantes que son autenticas cuchillas y que causan continuamente heridas a los perros. Estas se encuentran en zonas donde los perros apoyan sus patas para asomarse a mirar hacia fuera de la perrera. También los azulejos rotos provocan cortes en las patas y en el hocico de los perros
En las fotografías se observa también como en la zona donde tienen instaladas sus camas y donde duermen, el suelo es de hormigón y ya tremendamente deteriorado por el paso de los años, no facilita el drenaje del agua ni su limpieza. Esta imposibilidad de drenar el agua de la zona de la cama provoca que se acumule tanta humedad que no desaparece en todo el invierno, llegando a crear una capa de moho y verdina e incluso que crezcan hierbas del mismo suelo de cemento. Esta humedad y verdina se puede observar claramente en muchas de las fotografías de la zona de la cama y alrededor de los bebederos. Esto provoca que los perros contraigan enfermedades reumáticas y bacteriológicas y que por ejemplo pasen el invierno entero con la cama mojada.
Algunos perros duermen directamente sobre el cemento roto, con todo lo que eso supone, pues es tal el nivel de ansiedad y estrés que acumulan estos perros que literalmente destrozan las camas y duermen en el suelo.








  















































































































































































































































 2.      Fotos de la “clínica veterinaria”

Imagen más propia de un hospital abandonado de la segunda guerra mundial que de una clínica de una Unidad Canina de la Policía Nacional. En este lugar y en estas condiciones se almacenan los medicamentos de los perros, también se realizan curas, vacunaciones e incluso alguna operación de menor entidad.







































































3.      Fotos de la “pista de adiestramiento”
La zona de la que se dispone para entrenar está llena de desechos y malas hierbas. El terreno es cemento deteriorado y lo que se observa al final de la explanada es una montaña de excrementos de todos los caballos de la unidad de caballería. Esta pista está unida a la zona de las perreras y la montaña de excrementos que se observa, dista de donde viven los perros no más de 30 o 40 metros, creando un foco de infección y de mosquitos de manera constante alrededor de los perros. Recordemos que enfermedades como la leishmania o la filaria se transmiten por los mosquitos.
En épocas de calor (hablamos de Sevilla que en verano se superan los 45 grados) las plagas de moscas son tan grandes que inundan toda las instalaciones tanto las de los perros como la del personal.










































En esta imagen se puede observar la boca de incendios, inoperativa pero certificada por los responsables de Riesgos Laborales.

viernes, 24 de octubre de 2014

¡Mi perro no es una maleta!

Las compañías aéreas tratan como maletas a los animales que nos acompañan en el viaje. Algunos no sobreviven a los golpes de calor, la deshidratación, la manipulación y el estrés, y mueren durante el trayecto.
El transporte de mascotas en los aviones no está regulado por ninguna ley o normativa común. Varía dependiendo de cada compañía aérea y del peso del animal.
La empresa reclamador.es, especializada en la defensa de los derechos de los usuarios de aerolíneas, ha puesto en marcha la campaña ‘Reclama conmigo’, dirigida a pedir a la Organización Internacional de Aviación Civil (OACI) que regule el transporte de los animales en los vuelos, y que, por lo tanto, los animales no sean tratados como un objeto más.

Coco murió en la bodega del avión en un trayecto de Air Berlín.
Coco murió en la bodega del avión en un trayecto de Air Berlín. Foto: Manuel Álvarez

¿Qué normas son las que rigen para las mascotas cuando acompañan a sus dueños en un viaje de avión o en un tren? ¿Qué derechos tienen? ¿Qué responsabilidad deben asumir las compañías aéreas en el caso de que un animal muera o llegue en mal estado a su destino? ¿Qué pautas hay que seguir para que sufran lo mínimo? Estas son algunas de las preguntas que nos surgen cuando se presenta un viaje y deseas llevar a tu animal contigo y no dejarlo en manos extrañas.
Lamentablemente, muchas de estas respuestas no se conocen hasta que ocurre una desgracia y la mascota fallece durante el trayecto o llega en mal estado. No es algo habitual, por fortuna. Pero los casos que han transcendido –sobre todo durante los meses de verano- son suficientes como que hayan saltado las alarmas entre aquellas personas que suelen viajar con sus animales de compañía sin saber cuáles son sus derechos. O, simplemente, si los tienen.
La primera sorpresa que se sufre cuando se va a emprender un viaje con una mascota es comprobar cómo en los aeropuertos se les trata como a las maletas. Sin miramientos de ningún tipo. Para los dueños es muy duro ver desaparecer a sus perros dentro de un pequeño transportín por la misma cinta por la que desaparece el equipaje. La preocupación por su estado no desaparece hasta el final del trayecto. Y a veces ese final viene con tragedia. 
No es una exageración. Tres casos recientes de perros que han muerto mientras realizaban viajes en avión –casualmente en la misma ruta aunque en fechas diferentes- son motivo suficiente para la indignación y la alarma.

El caso de Coco

El pasado 25 de julio falleció Coco, un buldog inglés de cinco años, durante el trayecto entre Palma de Mallorca y Sevilla en un vuelo de Air Berlín. El animal estaba perfectamente de salud antes de embarcar y ser depositado en la bodega del avión, según cuenta su dueño, Manuel Álvarez, que viajaba acompañado de su mujer, embarazada entonces de ocho meses.
“En Palma pesaron al perro con el transportín en la misma cinta en la que facturan las maletas. La señorita nos dijo que no nos preocupáramos porque le vimos algo nervioso. No nos dejaron ponerle agua. Pagamos los 75 euros de su billete. Cuando llegamos a Sevilla y vimos que el trasportín de Coco no salía por la cinta nos extrañó. Esperamos, y nada. Hasta que llegó una operaria y nos dijo: “Tu perro no viene bien’”.
Imaginándose lo peor, Manuel preguntó: “¿Está muerto?”. “Pues, sí”, fue la respuesta. A los pocos minutos, un carrito del aeropuerto les entregó el transportín con Coco dentro, sin vida. Manuel, viendo que el cuerpo aún estaba caliente, intentó reanimarlo dándole masajes cardíacos. Todo fue inútil.
“A mi mujer le dio un ataque de ansiedad y se puso a llorar”, relata el hombre. Aun así, nadie les atendió. Ante la irreversible situación, Manuel se dirigió al puesto de la Guardia Civil del propio aeropuerto y puso la pertinente denuncia. Después, logró que los responsables de Air Berlín firmaran un certificado en el que se acreditaba que se les entregó el perro muerto. El caso está manos de abogados.
“¿Que qué es lo que quiero?”, pregunta Manuel. “Solo que alguien asuma responsabilidades por lo ocurrido. Esto no se puede tolerar”, replica.

Norah también murió tras un viaje en avión

Un caso similar ocurrió el 17 de agosto de 2013 en el vuelo de Palma de Mallorca a Sevilla, esta vez de Air Europa. Cristina García viajaba con su novio y con los tres perros de su hermana, bulldogs franceses: Norah, de tres años, Ronny, de dos, y Happy, de un año y medio. Los tres, como es habitual, fueron “facturados” y trasladados a las bodegas del avión.
Al llegar al aeropuerto sevillano la pareja se dirigió a la cinta de las maletas para recoger los transportines de los animales. “El macho y el chiquitín tardaron en salir y llegaron con claros síntomas de haber vomitado y orinado. Respiraban mal porque son perros chatos. Pero los reanimamos y poco a poco se recuperaron”.
La última en salir fue Norah. Cristina cuenta que enseguida se percató de que “algo no iba bien”. “No se movía”, explica. Se quedó petrificada. La perra estaba muerta. Nadie acudió a darles explicaciones. Tampoco a ayudarles. “Los que se desvivieron con nosotros fueron los demás pasajeros, que nos pasaban botellitas de agua para ver si podíamos hidratarlos”, relata.
La primera reacción de Cristina y su pareja fue ir al mostrador de la compañía aérea. Pero estaba cerrada. De modo que se dirigieron a la Guardia Civil del mismo aeropuerto e interpusieron una denuncia.
Después de mucho batallar, Air Europa les ofreció 600€ de indemnización. Pero no están de acuerdo. Creen que ese dinero no reemplaza el sufrimiento y la pena que han pasado. Como el dueño de Coco, también quieren que haya un cambio en la normativa para que ninguna otra mascota pase por esas terribles circunstancias..

Nano, fallecido por un golpe de calor

El tercer caso se remonta a julio de 2012. Francisco Javier Ramos viajaba con Nano, su perro bulldog inglés de seis años, desde Sevilla a Palma de Mallorca con Air Berlín. Según denunció su dueño, y certificó un veterinario, el animal falleció como consecuencia un golpe de calor después de haber permanecido a pleno sol más de una hora en la pista del aeropuerto. Su transportín iba en el mismo carro donde iban también las maletas para ser subidas a la bodega del avión.
Lo más indignante es que la compañía aérea ocultó el cadáver del perro. Esperó a que todos los demás pasajeros acabaran de recoger sus equipajes y se marcharan de la zona para entregárselo a su dueño.
Como en los anteriores casos de Coco y Norah, Francisco Javier puso su caso en manos de reclamador.es, una empresa especializada en la defensa de los derechos de los usuarios, cuyos abogados interpusieron una demanda contra la compañía aérea alemana por “negligencia” durante el transporte del perro y “daño moral” ocasionado a su dueño.

En un principio, y ante la escasa respuesta de Air Berlín, se llegó a fijar un juicio. Sin embargo, finalmente ambas partes llegaron a alcanzar un acuerdo “amistoso” y Francisco Javier fue indemnizado con 2.635 euros, con lo que quedó zanjado el asunto. “La victoria no es solo económica sino moral y ética”, expresaron entonces los artífices de la denuncia.

¿Qué dice la ley?

El transporte de mascotas en los aviones no está regulado por ninguna ley o normativa común. Varía dependiendo de cada compañía aérea y del peso del animal.
Según nos explica Cristina Naveda, responsable de comunicación de reclamador.es, los animales de pequeño tamaño pueden viajar junto al dueño en cabina. Siempre que no excedan de cierto peso.
¿Cuál es el máximo permitido en estos casos?. “El tope de kilos lo decide cada aerolínea. Algunas compañías incluso permiten reservar asientos para ellos”, aclara Cristina. Los de tamaño medio y grande deben viajar en la bodega, previo pago de un billete cuyo coste oscila entre 40 y 80 euros o incluso más si el animal es de gran tamaño. Deben ir dentro de un transportín cerrado y homologado por la UE, del que no puedan escaparse. Aunque dentro llevan un recipiente para que durante el trayecto puedan beber, en la mayoría de los casos no se les permite dejarles agua ni comida. Salvo que el viaje sea de largo recorrido, por lo que entonces necesitan que el transportín esté mejor acondicionado.
Además de asegurarse de que su traslado es seguro, los dueños de las mascotas deben presentar en el aeropuerto el certificado veterinario de vacunas y los datos pertinentes de control del animal.
Cuando el viaje se realiza en coche, la ley de tráfico establece como obligación del conductor que el animal esté bien ‘anclado’ en la parte de atrás del vehículo para que no pueda salir despedido, y también como medida de seguridad para la circulación.
Las únicas excepciones que hay para que una mascota pueda acompañar al dueño en un viaje sin tantas medidas de seguridad son los perros guía para personas ciegas o los de asistencia a las personas con alguna minusvalía.

¿Qué es lo que hay que hacer antes de un viaje?

Javier García, educador canino, alerta de las consecuencias que pueden sufrir las mascotas después de una situación de estrés. Si lo han pasado mal, el miedo a volver a ser sometidos a un nuevo viaje es motivo suficiente para que presenten un estado elevado de ansiedad o lleguen a desarrollar fobias.
Para intentar que el animal sufra lo mínimo posible, este experto recomienda que antes de emprender un viaje, sobre todo si éste va a ser largo, “lo primero que deberíamos hacer es habituar al perro al transportín. Se debe hacer con periodos cortos de adaptación, dándole comida, dejándole juguetes en el interior y poniéndole su cama dentro. En definitiva, hacer que forme parte de su rutina diaria y que lo identifique con algo agradable”.
“Pasada esta primera fase", añade Javier, "hay que ir poco a poco dejando al perro periodos de tiempo más largos dentro del transportín con la puerta cerrada, tal y como va a viajar, hasta completar el tiempo que se tiene previsto para la duración del viaje, con el fin de minimizar el posible estrés que le pueda producir esa situación”.

No dar tranquilizantes, salvo en viajes largos

Si el viaje se va a realizar en tren, la normativa tiene previsto que el perro vaya con bozal, por lo que es posible no tener que usar transportín y llevarlo en brazos. “En este caso también se le debería ir habituando al bozal, primero durante cortos periodos de tiempo y más largos cada vez”, explica Javier.

¿Cuál es la responsabilidad de la aerolínea?

Mucha gente se pregunta asimismo qué responsabilidad contrae la compañía aérea en el caso de que la mascota sufra algún daño, se pierda durante el traslado o incluso muera. Porque lo cierto es que al adquirir el billete para una mascota ninguna compañía presenta a los dueños documento alguno para firmar en el que conste que no se responsabilizan de los perjuicios que ésta pueda sufrir durante el viaje.
“Se genera una responsabilidad extracontractual por parte del que ha causado el daño. En España es delito el maltrato animal, pero dudamos mucho de que los casos de mascotas fallecidas que han llegado hasta reclamador entren en esa categoría”. “Las actuales normas de aviación solo diferencian entre personas y maletas; por lo tanto, ante la ley, una mascota es lo mismo que un equipaje”, explica Naveda.

Mejorar las condiciones de transporte

Todos los expertos consultados creen que se deberían mejorar las condiciones en las que viajan nuestras mascotas en los aviones, habilitando un lugar bien acondicionado de temperatura y ruido, y permitiendo, además, que el propietario pueda supervisar de vez en cuando su estado. Sobre todo, si se trata de perros enfermos que necesitan medicación o de mascotas de avanzada edad.
Igualmente, todos coinciden en que las compañías aéreas deberían mejorar las condiciones del embarque de los animales para que éstos no sean tratados como si fueran “equipaje”. Muchos perros han sufrido en verano las consecuencias de permanecer largo rato a pleno sol en las pistas, esperando el momento de ser introducidos en la bodega del aparato junto a las maletas. Las consecuencias pueden ser nefastas. El caso de Nano lo acredita. “Esto se podría evitar si pudiéramos acompañar a nuestra mascota hasta el momento del embarque”, afirma el educador canino.

Una campaña para exigir cambios en la normativa

Ante el aumento de las denuncias por maltrato y daños ocasionados a los animales durante los viajes, reclamador.es ayudó a poner este verano en marcha la campaña ‘ Reclama conmigo’, dirigida a pedir a la Organización Internacional de Aviación Civil (OACI) que regule el transporte de los animales en los vuelos, y que, por lo tanto, los animales no sean tratados como un objeto más.
La campaña la lidera Cristina García, dueña de Norah, y cuenta con el apoyo de rostros tan conocidos como Michelle Jenner, Vanesa Romero, Javi Nieves, Mar Amate, Roberto Pablo, Nathalie Seseña, Adriana Abenia, Helena Resano, Rosa Montero, Antonia San Juan, Carlos García-Hirschfeld y Silvia Abascal, y el de nuestra compañera, Ruth Toledano, entre otros.
La iniciativa está teniendo una gran repercusión. Hasta el momento van recogidas más de 80.000 firmas. Pero pretenden alcanzar las 100.000. ¡Desde El caballo de Nietzsche os animamos a que os suméis a ella abriendo este enlace y firmando la petición!

jueves, 23 de octubre de 2014

La suciedad del cerdo

Escrito por  Xavier Bayle

¿Por qué los cerdos son sucios? ¿Quién decidió que lo fueran?. La crisis ecológica se nutre de miles de millones de inocentes.
LA SUCIEDAD DEL CERDO

Karczówka (Polonia), 17 de julio de 2014, siete personas mueren asfixiadas en el depósito de excrementos de una factoria de engorde de cerdos (granja). La primera cae por accidente y muere en poco segundos, debido al metano y otros tóxicos exhalados por dichos depósitos. Otra persona de su familia intenta socorrer a la primera y cae también aturdida, luego otra con la misma intención,... hasta siete. Sólo puede salvarse la madre, después de unos días con riesgo de quedarse en coma. Sí, ese es el precio real de los embutidos, cuando las verdugas se convierten en víctimas.
El cerdo es un animal considerado sucio en muchas culturas, pero casi todas las culturas lo comen con disfrute (¿paradoja?, ¿hipocresia?), las extremidades desecadas de millones de personas no humanas cuelgan de ganchos de metal en bares y comercios, lo llaman jamón por disfrazarle su verdadero nombre: mutilación, amputación, despojo. Los excrementos porcinos se han convertido en un problema ecológico mundial de millones de toneladas, que acidifica la tierra, envenena el aire e intoxica las aguas freáticas. Miles de millones de cerdos, casi insuficientes para satisfacer la gula humana.
El cerdo además enriquece nuestros idiomas. Cerda, guarra, puerca, marrana,... son apelativos designados para defenestrar a quienes odiamos o despreciamos. Las capitalistas son cerdas, las machistas son cerdas, las faltas de higiene son cerdas, las gordas comen como cerdas..., hemos decidido que el cerdo sea así de asqueroso, para poder exterminarlo sin culpa, pareciendo acaso que el jamón es una especie de justicia social. Mata al cerdo y haz justicia, reza la doctrina.
         El cerdo es considerado un animal bajo porque le obligamos a dormir en su propio excremento, pero ¿qué sucedería si encerraramos durante cierto tiempo a quince humanas orfanadas y desconocidas en un espacio completamente vacío de veinte metros cuadrados, desnudas y sin nada que hacer?. Exacto: se despedazarían entre sí, se revolcarían y devorarían su propia mierda, se violarían de mil modos, se golpearían, enloquecerían y se degradarían hasta que probablemente una de ellas, la más fuerte, quizas muriera por infección de las heridas resultantes de las peleas, o simplemente se suicidaría de la pura soledad. Basta con conocer la naturaleza humana para aseverar dicho comportamiento, natural por otra parte, dado que somos seres sensibles, necesitadas de estímulos, espacio, respeto, aceptación, independencia y salud física y mental para comportarnos medianamente bien, hasta tal punto que no somos nosotras sin esas condiciones. Conscientes de nuestra miseria sin embargo no vacilamos en cometer dicha tortura contra otros animales idénticos a nosotras en sociabilidad, sensibilidad, neurobiología y en la casi totalidad de lo importante: los cerdos.
Animales con inteligencia comparable a la de una humana de tres años de  edad o un perro, desde el punto de vista etológico el estudio de cualquier especie de no humanas encarceladas no ofrece los mismos resultados que el estudio en libertad, porque cada científica sabe -aunque finja-, que el confinamiento produce estres, ansiedad y destrucción psicológica con patologías varias. La cría de cerdos y su sentencia a muerte es innecesaria, perversa, cruel, monstruosa, criminal y una sociedad que se denominara justa, debería rechazarlas terminantemente.
         Pero no vivimos en una sociedad justa, por eso la gente inmune al dolor ajeno compra productos derivados de la barbarie, desde las bananas de sangrientas corporaciones o el café que mata de hambre a quien lo cultiva, hasta los trozos de personas, sus excreciones y menstruaciones. La gente en esta sociedad injusta vota a la fascista que más dulcemente le tortura, y alimenta economías cuyo valor en el mercado sobrepasa al de las individuas que la generan, construye templos en honor a sus miedos y elude sus responsabilidades civiles, sus obligatoriedades éticas y las reglas que conllevan ciertos derechos, para escabullirse -tan picaresca o vomitivamente como su falta de escrúpulos le permita-, de la parte que individual y colectivamente nos corresponde cumplir para construir sociedades justas. Por eso nos imponen las leyes, herramientas fascistas contra el fascimo que nos caracteriza.
         Sociedades sin víctimas es un ideal al cual hay que dirigirse, independientemente de la voz general que grita que no se puede. El mundo cambia en una misma, pero ese cambio invariablemente afecta y beneficia a las demás, vivimos de pactos no verbales, de reglas que debieran estar basadas en el sentido común, no en la inteligencia o la coyuntura económica. Estamos sujetas a la capacidad que tengamos o adquiramos de relacionarnos entre nosotras con actuaciones no competitivas, no invasivas y respetuosas. Sin embargo existimos enamoradas del guetto voluntario de la ignorancia moral, desoyendo los gritos y aullidos de las demás, creyéndonos buenas personas, inteligentes y libres.
         El ser humano está enfermo de humanidad y sus patologías son el racismo, el clasismo, el especismo, el sexismo, la homofobia, el ageismo o cualquiera de las sintomatológicas de su estado febril, ¡basta de echarle siempre la culpa a “las otras”!. La diferencia sustancial entre el cerdo encarcelado y la disidente política encarcelada, es que el cerdo no es alimentado con disidentes politicas, y si al reves.
         Liberación animal o barbarie. La locura amedrenta la sociedad mientras las cuerdas son perseguidas por alteración del orden público (del fascismo público).Nos llaman idealistas, pero idealismo es pretender que un sistema depredador sea sostenible, idealista es pretender que una mecánica destrucción de los ecosistemas sea neutro para nuestra existencia, idealista es proclamar que el crecimiento económico y aún el mantemiento de las estructuras de destrucción de recursos a esta escala -siquiera a la de hace 50 años- sea cientifícamente aceptable para la longevidad del planeta, idealista es afirmar que siendo animales inferiores desde el punto de vista genético hayamos creído realmente que somos la mejor obra de la vida, idealista es aceptar la deificación de las incongruencias como mal aceptable de la naturaleza humana o la institucionalización de la incoherencia y en definitiva la creación de un sistema jerárquico donde alguien muera para satisfacer el capricho de alguien. Hablo de humanas y hablo de cerdos. La alternativa está servida, se llama veganismo, se llama antiespecismo, se llama humanismo.

miércoles, 22 de octubre de 2014

Prou subvencions a la tauromàfia. Iniciativa Animalista

Escrito por 

Aquests recursos haurien de servir per a l’empoderament econòmic del món agrari d’aquests territoris, per a potenciar l’esforç de les famílies que treballen xicotetes explotacions i de són la base de cooperatives o xicotetes empreses que innoven i diversifiquen.
Prou subvencions a la tauromàfia
Iniciativa Animalista dóna suport a la proposta del Grup Verd del Parlament Europeu, encapçalada per Bas Eickhout, per a eliminar els subsidis europeus a les ramaderies que crien i venen els animals que torturen i maten a les places.  La iniciativa es votarà el proper 22 d’octubre en el marc del procés d’aprovació dels pressuposts de l’UE pel 2015.
El negoci taurí comença a aquestes ramaderies, que també són les primeres beneficiàries de les  seues subvencions milionàries.  Aquest negoci depèn absolutament dels impostos de totes i tots perquè no genera interès: totes les enquestes mostren que molt poca gent està a favor que la tortura taurina continue, i són menys encara les que han sigut testimonis o han pagat una entrada per a una correguda de bous.
L’entramat de subvencions a la tauromàfia arriba a totes les instàncies: des de xicotets ajuntaments que han eliminat dels seus pressupostos tot suport a la ciutadania que no pot cobrir les seues necessitats per falta d’ingressos, fins a la Unió Europea.  Els pressupostos europeus són una font important d’ingressos per a les ramaderies.
Els bous que moren a les places són una xicoteta part dels que naixen a les ramaderies: sumats amb que es linxen als bous al carrer i correbous, representen un de cada 20 animals, aproximadament.  La major part de la resta moren als escorxadors i són el pretext de subvencions eixides de la PAC (Política Agrària Comuna).  
Gràcies al potent lobby taurí espanyol, encapçalat per representants del PP i del PSOE, les ramaderies taurines es “camuflen” per a passar com a explotacions ramaderes convencionals i rebre ajudes com les destinades a subvencionar les pèrdues per les fluctuacions de preus.    
Aquestes i altres subvencions, com la destinades a la protecció del medi rural des del pressupost de Medi Ambient, representen al voltant d’un terç dels ingressos de les ramaderies, tot a costa del conjunt de la ciutadania de la Unió Europea.  
També s’ha de tindre en compte que aquesta és una forma d’acaparar els recursos per les grans famílies latifundistes de Castella i Andalusia, a les que pertanyen les grans ramaderies.  Destaquen les famílies Domecq, Hernández Barrera, López de la Puerta o de Samuel Flores, que han estat entre les primeres receptores d’aquestes subvencions amb el Ducat d’Alba, el de l’Infantat, etc.
Aquests recursos haurien de servir per a l’empoderament econòmic del món agrari d’aquests territoris, per a potenciar l’esforç de les famílies que treballen xicotetes explotacions i de són la base de cooperatives o xicotetes empreses que innoven i diversifiquen.  
Emplacem la nostra representació al Parlament Europeu per a que aquesta iniciativa del Grup Verd, que està recollint firmes de tota la ciutadania a través de http://supportgreens.eu/es/corridasdetoros, tinga el suport necessari.  Especialment a la Marina Albiol, el Jordi Sebastià i el Josep Maria Terricabras, que s’han destacat per recolzar les propostes alternatives a la tortura taurina als Països Catalans.  També emplacem especialment la resta de representants dels partits polítics que donàrem suport a la ILP Prou! a Catalunya i als de Podem, que compten al seu programa amb el compromís per l’abolició de la tortura taurina.  

Iniciativa Animalista 16 octubre 2014

martes, 21 de octubre de 2014

A Excálibur lo mataron y a Bentley le dan la oportunidad de seguir viviendo

¿Por qué el perro de Dallas ha corrido diferente suerte que Excálibur? ¿Cómo se ha manejado la situación en EEUU? ¿Dónde está Bentley? ¿Qué harán con él? ¿Quiénes se han hecho cargo de su cuarentena? ¿Servirán para algo las pruebas a las que se le someta?
¿Era Excálibur peligroso para la especie humana? ¿Qué pasó en el piso de Alcorcón? ¿Hubo improvisación? ¿Cómo fue eliminado Excálibur? ¿Qué se hizo con su cadáver? ¿Podemos considerar que fue eutanasiado? ¿Actuaron los veterinarios de forma ética y respetaron el bienestar animal? ¿Qué consecuencias ha tenido para los responsables?
Bentley, el perro de la enfermera infectada por ébola en Dallas, trasladado a un lugar seguro para pasar su cuarentena.
Bentley, el perro de la enfermera infectada por ébola en Dallas, trasladado a un lugar seguro para pasar su cuarentena. Foto: Dallas Animal Services and Adoption Center
Continuamos con el artículo que eldiario.es publicó en este blog el día 10 de octubre, porque después de que Excálibur fuera eliminado se han desencadenado una serie de acontecimientos que merecen ser conocidos e interpretados. Además quedan muchos interrogantes que deberían ser aclarados por las autoridades competentes.
En primer lugar, sabemos que un nuevo caso de ébola ha sido diagnosticado en EEUU, y es asombrosa la similitud con el que hemos vivido en Madrid. Podemos decir que son idénticos. Una enfermera de Dallas, Nina Pham, que estuvo atendiendo al ciudadano liberiano infectado por el virus, Thomas Eric Duncan, ya fallecido, está ingresada porque padece la enfermedad, y además convivía, como Teresa Romero, con un perro. Profesiones idénticas, modo de infección parecido y animales de compañía idénticos en una situación idéntica: aislados y solos en sus domicilios.
Si en las primeras horas las noticias que llegaban a través de los medios de comunicación americanos eran un tanto contradictorias, hoy podemos decir que el perro no va a ser eliminado, ya que ha quedado al cuidado del Dallas Animal Services and Adopción Center. El perro es un Cavalier King Charles Spaniel de nombre Bentley y pasará la cuarentena en una antigua base naval en Hensley Field, propiedad del Ayuntamiento, por orden del juez del condado Clay Jenkins. Allí está siendo atendido por personal sanitario del Collage of Veterinary Medicine & Biomedical Sciences,Texas A&M University.
Según ha manifestado el alcalde de la ciudad, Mike Rawling, el perro "es muy importante para la paciente y queremos que esté seguro".
Resulta curioso saber que mientras en Madrid las autoridades sanitarias se quitaron un problema de encima y justificaron la eliminación de Excálibur en un "altamente improbable" contagio a seres humanos ("principio de precaución"), y en que no había ningún lugar que cumpliera los niveles de bioprotección 4 para aislarle, que es lo que se requiere en España en estos casos, el perro de la enfermera americana estaba en su domicilio; eso sí, atendido y controlado.
En la mañana del día 15 vimos unas fotos de la salida del animal de su domicilio en brazos de un operario, siendo trasladado en un trasportín convencional sin ningún tipo de aislamiento. Resulta evidente que los protocolos de bioseguridad de EEUU nada tienen que ver con los que se activaron en Madrid para perros "presuntamente infectados" de virus ébola. En este enlace se puede ver que los operarios que manejaron al perro no iban protegidos, salvo el que le sacó en brazos de la casa; en  éste se pueden oír las declaraciones de la veterinaria que lo atiende, y en  éste lo que ha dicho el Dr. William Schaffner, jefe de Medicina Preventiva de la Universidad de Vanderbitt: " No debemos preocuparnos de las mascotas, no son un peligro".
Son éstas y no otras las razones por las que defendimos y defendemos que la decisión de eliminar a Excálibur ha sido científicamente irresponsable. En una encuesta que se ha puesto en marcha en un foro de veterinarios, 61 compañeros comparten nuestra opinión, frente a 9 que consideran que sacrificar al perro fue una decisión científicamente responsable. Aún así, el decano de la Facultad de Veterinaria sostenía el día 8 de octubre que el sacrifico del perro era la única opción posible, invocando al "principio de precaución".
Y es ésta la línea de conclusiones científicas que han utilizado los veterinarios de EEUU, así como el director de los Centros de Control y de Prevención de Enfermedades (CDC), el Dr. Thomas Frieden, para aclarar que el perro americano no será eliminado. Es aquí donde se establece la única diferencia importante entre ambos animales: uno ha muerto, el otro tendrá la oportunidad de seguir viviendo. " Sobre las bases del limitado conocimiento, ellos decidieron sacrificar al perro, y el pueblo estadounidense y todo el mundo ha expresado que eso no es lo que quieren que pase aquí en Dallas", ha declarado Jodi Jones, agente del Servicio de Animales de la ciudad.
Queremos pensar que los veterinarios americanos aprovecharán esta coyuntura para obtener conclusiones científicas de máxima importancia en lo que respecta a la relación del ébola con los perros y su incidencia en la enfermedad en humanos. Y para tranquilizar a aquellos que piensan que este perro servirá de animal de experimentación (hemos llegado a leer declaraciones que apuntan a que será objeto de vivisección), entendemos que las pruebas que con él podrán ser realizadas se limitarán a tomar muestras de saliva, sangre, heces y orina, es decir, análisis rutinarios que todos los clínicos hacemos con nuestros pacientes en nuestro trabajo diario. Aunque se pueda pensar que se trata de un caso aislado, y que la muestra para el estudio es mínima: ¿se imaginan que se encontrara el virus en el organismo de Bentley, que lo elimina, y que se pudiera concluir que los perros sirven de reservorio y diseminan el agente patógeno? En caso contrario, la hipótesis de que los perros no son portadores del virus, y que nada tienen que ver en el contagio de la enfermedad, seguiría vigente.

Excálibur, el perro que mató la Comunidad de Madrid por haber estado en contacto con la sanitaria infectada por ébola.
Excálibur, el perro que mató la Comunidad de Madrid por haber estado en contacto con la sanitaria infectada por ébola.
 
¿Y qué es lo que ha pasado en España desde que Excálibur fue eliminado?
En primer lugar unas sorprendentes declaraciones del presidente del Consejo General de Colegios de Veterinarios de España, Juan José Badiola, que el lunes 13 de octubre decía que a la hora de tomar la decisión no se ha tenido en cuenta  la realidad social, ya que el tema de los animales está muy latente, que se ha improvisado con el ébola y que la decisión de la Comunidad de Madrid obedece a un principio de precaución desde el punto de vista sanitario, aunque se deberían haber tenido en cuenta otras opciones como aislarlo, añadiendo: " Yo creo que el perro no estaba contagiado".
Para entender lo que ha sucedido debemos retroceder a la mañana del día 8 de octubre, el fatídico día para el perro de Teresa Romero y Javier Limón. Esa mañana el rectorado de la Universidad Complutense autorizaba, por medio de un comunicado, que el cadáver de Excálibur fuera trasladado a las instalaciones de VISAVET (nivel de bioprotección 3), ubicadas en la Facultad de Veterinaria de Madrid, para ser incinerado. Circuló también el rumor de que se le realizaría una necropsia en las citadas instalaciones, que fue desmentido. Pocas horas después, cuando los efectivos desplazados ya estaban en el domicilio de Alcorcón y habían eliminado al perro, el rectorado de la Universidad Complutense emitió un nuevo comunicado en el que expresaba su negativa a que el cadáver entrara en las instalaciones que están bajo su gobierno. La razón es aún más sorprendente que la decisión del rectorado: al parecer, el Comité de Salud y Seguridad Laboral desaconsejaba el "tratamiento del cadáver". ¿Tenía este comité conocimientos científicos sobre la relación perro-virus ébola para opinar en este asunto? Nos caben dudas al respecto, pero lo que está claro es que el rector afirmaba que se tomó esta decisión por la seguridad del personal que trabaja en la Facultad y de los alumnos.
¿Qué se haría entonces con Excálibur? Esta pregunta me la hicieron en  un plató de TV a las 19.00 horas de ese mismo día, y no supe qué responder. Realmente no lo sabían ni los que tenían en su poder el cadáver del perro. Parece ser que su cuerpo acabó en el San Antonio Abad Memorial Center, un crematorio para perros en Paracuellos del Jarama, cuyo gerente fue entrevistado por TeleMadrid en la noche del día 8, negándose a hacer declaraciones sobre cómo se había procedido por no estar autorizado. Un medio de prensa informaba de que dicha instalación no tiene los permisos pertinentes, haciéndose eco de las declaraciones de concejales del Ayuntamiento de Paracuellos. Desconocemos si es o no cierto.
A partir de aquí podemos empezar a elucubrar, pero no creemos que lo que vamos a exponer a continuación esté demasiado alejado de lo que realmente pasó, una vez leídas las  declaraciones del máximo responsable de VISAVET en un medio de comunicación, que visto lo visto, tuvo que improvisar, y que dimitió de su cargo el día 14 al sentirse desautorizado, añadiendo que también se negó la entrada de la furgoneta en las instalaciones de la UCM para su desinfección, una vez que el cadáver fue incinerado. La desinfección se realizó en las dependencias del SUMA por los propios veterinarios. Más improvisación. En Cuatro TV hacían una recopilación de los hechos.
Lo primero que nos llamó la atención fue el tiempo que transcurrió entre la llegada de los efectivos de VISAVET al domicilio y su salida, que pudieron ser 3 o 4 horas más de las previstas. Sabemos que dado lo "complicado del manejo de la situación" ( visto como se ha hecho en EEUU lo ponemos entrecomillado), el perro fue anestesiado a distancia, y no sabemos si realmente la mezcla de medicamentos utilizados pudo acabar con su vida de forma rápida, o se procedió posteriormente a la aplicación de la inyección letal por vía intravenosa. Como veterinarios pensamos que uno o varios dardos con las sustancias que se consideraron oportunas, inoculadas por vía intramuscular o intraperitoneal o intratóracica, pudieron causar la muerte del perro, pero no con la rapidez deseada. Sabemos que los barbitúricos, inoculados a través del peritoneo, pueden causar la muerte en 15-30 minutos, mientras que por vía intravenosa la provocan en pocos segundos. De hecho, la vía indicada para la aplicación de los barbitúricos es la intravenosa, no se contempla la intramuscular, y se preconiza la intraperitoneal en muy pocas ocasiones, usando en este último caso un anestésico para evitar el dolor y la irritación que pueden provocar al entrar en la cavidad abdominal.
Queremos por tanto que se haga público el protocolo que se siguió para darle muerte previa sedación (?), como se afirmaba en el comunicado emitido horas antes por la Comunidad de Madrid, porque pensamos que no la hubo. En el  comunicado de VISAVET se hace alusión a que todo se realizó con las máximas garantías de bienestar animal, pero queremos incidir, además de en lo apuntado, en el hecho de que este perro estaba solo en su domicilio desde hacía dos días, situación probablemente novedosa y angustiosa para él; que había salido varias veces a la terraza ladrando y aullando, y que la puerta de la vivienda fue forzada por orden judicial para proceder desde la misma a la aplicación de los anestésicos, impidiendo su salida, según se cuenta, con una barrera colocada a tal efecto. Entendemos que el grado de estrés y de miedo de Excábilur debió de ser importante. Lo que ocurrió una vez disparados los dardos tranquilizantes pudo ser esto: l os barbitúricos habrían provocado anestesia e inconsciencia, con parada respiratoria, seguida de hipoxia y posterior parada cardiaca. La Asociación de Veterinarios Especialistas en Pequeños Animales (AVEPA) sostiene en el documento " Veterinarios y el final de una vida. Eutanasia un acto clínico complejo" que " la realización de la eutanasia por vías intramuscular, subcutánea, intrahepática, intrarenal, intraesplénica, intratecal o cualquier otra vía, son totalmente inaceptables".
Entendemos que la situación planteada con Excálibur y el miedo al posible contagio, si se aplicaba un eutanásico por vía intravenosa tras la sedación, hizo que se optara por descartarla. Suponemos que se evitó por tanto cualquier posible contacto con la sangre del animal, dado el "riesgo indebido para el operador", lo que podría justificar la forma en que se llevó a cabo el procedimiento, según recoge el manual "Métodos de eutanasia para perros y gatos: comparación y recomendaciones", editado por la WSPA. Aún así, esta misma asociación aclara que la vía intramuscular no es admisible en ningún caso, y que la intraperitoneal, especialmente en animales de gran talla, no es adecuada porque puede provocar angustia y alejarse de los criterios exigidos de bienestar animal.
Poco más podemos contar. No hay certezas sobre cómo fue la muerte de Excálibur, que, de momento y como hemos apuntado, ha provocado la  dimisión del responsable del dispositivo veterinario que se desplazó a Alcorcón.
Entrar en la valoración moral de un acto clínico, la eutanasia de un perro en una situación excepcional, que no entendemos cómo llegó a darse, es complicado, pero con la información científica de que disponemos, y que hemos puesto a disposición de los lectores de eldiario.es, seguimos sosteniendo que no estaba justificada. La decisión de eutanasiar animales es un tema ético complejo que involucra muchos factores. La Sociedad Mundial para la Protección de los Animales (actualmente World Animal Protection) cree que la eutanasia es aceptable y necesaria cuando un animal está sufriendo debido a una enfermedad o herida incurable, o cuando un animal presenta un riesgo significativo para la salud y seguridad humana o de otros animales, a causa de enfermedad o comportamiento agresivo. Los veterinarios que tomaron la decisión de eliminar a Excálibur y los que lo hicieron posible tendrán su opinión al respecto, dados los cargos de responsabilidad que tenían en ese momento. Ellos sabrán si el procedimiento empleado y las razones que les llevaron a ponerlo en práctica pueden considerarse eutanasia ("muerte sin sufrimiento físico"), y si el método utilizado fue el adecuado. Nosotros consideramos que no lo fue en ninguna de las dos cuestiones planteadas.
Y una última reflexión: ¿si los sanitarios de medicina humana ponen en riesgo su vida atendiendo a enfermos por ébola u otros patógenos, los sanitarios veterinarios deberíamos hacer lo mismo ante un caso como el de Excálibur? Los compañeros americanos lo estén haciendo y los españoles lo han hecho en numerosas ocasiones frente a otras enfermedades, pero creemos que el día 8 de octubre no supieron estar a la altura que las circunstancias demandaban.
Entre tanto, nos llegan noticias esperanzadoras de la evolución clínica de Teresa Romero, a la que deseamos una pronta recuperación. Su esposo Javier Limón le ha escrito a Exkalibur (como él le llama) esta carta: "Te prometo que se hará justicia", concluye. Como veterinarios comprometidos contra el maltrato animal, lo deseamos.