Con fecha 21 de enero el Partido Animalista-PACMA solicitó de forma oficial a los 20 principales Ayuntamientos andaluces, así como a la propia Junta de Andalucía, los presupuestos destinados al fomento de la tauromaquia (subvenciones a plazas de toros, escuelas y peñas taurinas, así como financiación y publicidad de cualquier espectáculo o festejo con animales).
Ante el silencio administrativo de las corporaciones locales consultadas (Sevilla, Málaga, Córdoba, Granada, Jerez de la Frontera, Almería, Huelva, Marbella, Dos Hermanas, Cádiz, Algeciras, Jaén, San Fernando, Roquetas de Mar, El Puerto de Santa María, El Ejido, Chiclana de la Frontera, Mijas, Vélez – Málaga, Fuengirola) y del propio órgano de Gobierno andaluz, el Partido Animalista no ha podido corroborar los datos recopilados en un informe de aproximación elaborado en estos meses, que pretende concluir la cantidad de dinero público que se está destinando a la tauromaquia.
En medio de una crisis económica galopante, la Junta de Andalucía destina cerca de 20 millones de euros anuales a fomentar la tortura, según estimaciones del Partido Animalista.
“Consideramos inaceptable que los ciudadanos tengamos que seguir pagando la tortura de animales sin tener, siquiera, derecho a saber qué dinero y de qué manera se está destinando a fomentar la tauromaquia”, lamenta Francisco G. Leal, portavoz del Partido Animalista.
España es uno de los pocos países de Europa que no tiene una Ley de Transparencia de la Información, que obligue a las administraciones a hacer públicos datos y cifras de interés general.
“Si los ciudadanos desconocen en qué se está gastando la Junta el dinero de todos, no están en condiciones de ejercer su derecho a voto de manera responsable”, explica Leal.
En las próximas elecciones al Parlamento Andaluz, que se celebrarán el domingo 25 de marzo, el Partido Animalista presenta su candidatura en las ocho provincias andaluzas con la idea firme en su programa electoral de retirar inmediatamente cualquier subvención pública a la tauromaquia y prohibir esta tradición bárbara, cruel e injustificable.
No hay comentarios:
Publicar un comentario