La pasada noche del 1 de Enero de 2011 activistas simpatizantes de Igualdad Animal rescataron a 36 perros del criadero de animales para vivisección Harlan Interfauna situado en Sant Feliu de Codines según informan en su comunicado.

Harlan Interfauna es una multinacional con centros en Alemania, Holanda, Italia, Francia, Reino Unido, Suiza, Canadá, México, Estados Unidos, Japón, Corea del Sur e Israel dedicada a criar animales para su utilización en experimentos. Los animales criados en sus instalaciones de Sant Feliu de Codines (perros, gatos, hurones, ratones, ratas, cobayas, conejos, etc.) son enviados a los laboratorios de empresas, facultades, hospitales y complejos militares de todo el mundo en los que les obligan a ingerir sustancias tóxicas, les provocan tumores, inoculan virus, contagian enfermedades y provocan adicciones, les seccionan los huesos o les extraen glándulas y órganos, matan a sus crías, etcétera.

Según el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino 1.403.290 animales murieron en los laboratorios españoles durante 2009, lo que representa un aumento del 56,3% respecto al año anterior. Sin embargo esta cifra no refleja el número real de víctimas de la experimentación con animales en España dado que en tal informe no se contabiliza a los animales invertebrados que también son animales capaces de sentir y con intereses propios, por lo que la cifra exacta –aún desconocida– ha de ser necesariamente muchísimo mayor.

Igualdad Animal rechaza la experimentación con animales al tratarse de una práctica injusta basada en una discriminación. Solemos pensar que sus intereses no son tan importantes como los de los humanos y que, por tanto, estamos legitimados a frustrarlos si con ello obtenemos algún beneficio. Sin embargo, no hay motivo que justifique esta diferente consideración. Las preferencias hacia los miembros de nuestro mismo grupo (especie, sexo, raza, etc.) son irracionales y arbitrarias y por tanto han de ser rechazadas así como sus consecuencias.

Nuestro rechazo a la experimentación con animales no se traduce en el fin de la investigación científica, la cual puede desarrollarse sin el uso de éstos. En aquellos casos en los que no haya métodos sin animales disponibles, abogamos por el cese de dichos experimentos y la inversión en el desarrollo y aprobación de métodos sin animales. No abogamos por modificar las condiciones en que viven y son utilizados estos animales en los criaderos y laboratorios dado que consideramos ilegítima toda forma de experimentación con animales.

Quienes vivimos o hemos vivido con perros, gatos u otros animales comprendemos que éstos son seres con intereses propios, individuos únicos que aprecian su vida y que merecen nuestro respeto. ¿Qué pensaríamos si quien acabase en los laboratorios fuese el perro con el que convivimos?

Cada uno de esos treinta y seis individuos rescatados es hoy un motivo de alegría para nosotros. Por ellos queremos mostrar abiertamente nuestro apoyo a los activistas anónimos que han llevado a cabo esta acción y anunciamos que iniciaremos inminentemente una campaña de concienciación y presión en España para avanzar hacia el fin de la experimentación con animales.


Galería fotográfica:
http://www.flickr.com/photos/igualdadanimal/sets/72157625811032602

NOTA: Igualdad Animal no es responsable de esta acción ni, por tanto, reclama su autoría. No tenemos conocimiento de quiénes son los autores ni queremos saberlo. Las acciones llevadas a cabo por simpatizantes anónimos de la organización son únicamente responsabilidad de dichos individuos y no son vinculantes hacia la organización. Igualdad Animal como organización de defensa de los animales se hace eco de este comunicado que reproducimos íntegramente porque consideramos que se trata de información de interés general para la sociedad.



COMUNICADO
RESCATE DE TREINTA Y SEIS PERROS DEL CRIADERO DE ANIMALES PARA EXPERIMENTACIÓN HARLAN INTERFAUNA DE SANT FELIU DE CODINES



La noche del 1 de enero de 2011 un grupo de activistas por los derechos animales rescatamos a 36 perros del criadero de animales para experimentación Harlan Interfauna situado a las afueras de la localidad catalana de Sant Feliu de Codines dando en este año nuevo una nueva vida a estos animales.

Una vez dentro procedimos a documentar la vida tan miserable a la que estos animales habían sido condenados y a preparar su traslado. Encerrados permanentemente sin poder correr, jugar, explorar su entorno o relacionarse con otros varios de ellos presentaban además llagas en sus cuerpos –como evidencian las imágenes que grabamos esa noche– debido a que tenían que dormir en pleno invierno en contacto directo con el frío suelo de cemento cubierto de sus propias heces y orina.

Uno de los perros rescatados vivía totalmente aislado del resto sin ningún tipo de contacto con los demás animales. Esto es una forma de tortura psicológica para un animal social que precisa la compañía de otros con los que poder relacionarse. Otros estaban tan ansiosos por tener algún contacto y estímulo tras cerca de cuatro años encerrados que trataban desesperadamente de tocarnos entre los barrotes y llamar nuestra atención como podían. Cuando entramos en el recinto en el que se encontraban se abalanzaron entusiasmados sobre nosotros buscando nuestro cariño. Pocos minutos después nos acompañaban contentos fuera de aquel lugar en el que era el primer paseo que daban en libertad en toda su vida.

Dado su estado de salud física y psicológica, todos los animales rescatados han sido examinados por veterinarios. Algunos precisan de toda nuestra atención para ayudarles a superar el constante miedo en el que vivían. Todos ellos han sido llevados ya a lugares seguros donde serán queridos y protegidos. Desconocemos cuánto tiempo tardarán en confiar de nuevo en los humanos pero estamos seguros que el afecto y los cuidados que reciben ya en sus nuevos hogares conseguirán abrirse camino hasta sus corazones y podrán vivir felices y a salvo el resto de sus vidas.

Tras la dura vida en las instalaciones catalanas de Harlan Interfauna –y al igual que sucede en las de Green Hill en Italia y Marshall en EEUU entre otras– un destino aún peor aguardaba a estos animales: ser trasladados a laboratorios de vivisección en los que serían encerrados permanentemente en jaulas de las que sólo saldrían para ser sometidos a experimentos. Todos ellos habían nacido con la condena de convertirse en las víctimas de pruebas de toxicidad, experimentos de investigación biomédica y veterinaria, aprendizaje en facultades o experimentos militares que acabarían finalmente con sus vidas.

Los activistas que hemos llevado a cabo esta acción somos veganos y rechazamos el especismo así como toda forma de explotación animal, como la vivisección en este caso, el consumo de productos animales, su uso en espectáculos o para nuestra vestimenta porque consideramos que lo único importante a la hora de respetar a alguien es su capacidad para sentir y no su especie, sexo o raza. Queremos avanzar hacia una sociedad libre de discriminaciones en la que los demás animales no sean considerados seres inferiores a los que utilizar como recursos a nuestra disposición, sino individuos que merecen absoluto respeto. Seguiremos rescatando animales y denunciando su explotación hasta que la última jaula quede vacía y la vivisección y otras formas de opresión hacia los animales formen parte del pasado.

Por último, queremos dedicar esta acción a todos los activistas que luchan para acabar con la vivisección y recordar a todos los animales que se encuentran en estos momentos en los criaderos y laboratorios.